martedì, ottobre 06, 2009

Goodbye my friend



Y quedó regado, tirado sobre la puta mesa, sus entrañas cobijadas bajo su mierda, mientras, los perros comiendo de la misma feca reían como hienas entre amigos de los pobres muertos de aquella buena cena.

Que sabroso es comerse a un ser conocido, que rico es tener entre tus dientes la carne del odiado, del amado, del detestado y del desangrado.

Nunca tendremos otra cena así -murmuraban- jamás otra vez, nunca jamás una carne tan sana -vociferaban- Por favor, coman, coman, coman -alegaban-

Vomitando corrí de aquel lecho de muerte hacia cualquier parte que quisiera refugiarme de mi propio asesinato...