Creo que no debería dedicarte nada, ni minutos, ni palabras, ni canciones, ni recuerdos, nada. Pero, me remueve las entrañas pensarte, darme cuenta que no cambias y que sigues dañando a cualquiera que intentas convencer con tus falacias mal paridas.
Pobre hombre, eres un pobre que vive con todo y se siente vacío. Pobre hombre, quieres dejarnos sin nada y temes por tu vida sin nadie. Pobre hombre, eres tan pobre que ni siquiera tu compañía quiere quedarse. Pobre hombre, quieres ser sobre nosotros para que la pobreza no termine por matarte.

Siento que he tenido que soportar demasiadas tristezas, penas que un niño no quiere cargar, penas que deberían haber sido juegos, haber sido otra cosa y no lo que recuerdo.
Pero, en este blanco y negro, este blanco quiere decirte que en el fondo quiere que todo termine, que te alejes de alguna forma en paz. Quiere decir que, mi negro, nunca más pelearemos, nunca más volverán a temer junto a ti. Y en blanco, mi blanco, te dice que aún te quiere, pero, mi negro, negro sentimiento no significa más que su lúgubre pasar por sobre nuestra tierra.